Pertenecen a los pueblos originarios del Gran Chaco.
En la Argentina son cerca de 2000 peronas, repartidas en ocho comunidades.
Testimonio de Ets'iu -Chorote-La Paz- Salta (1900)
"Cuando éramos niños había un cacique grande. Pocos de nosotros conocíamos lo que era aquello. Cuidaba todo desde muy abajo hasta río arriba. Fue caminando desde su lugar, se llama Ajwenta Yejmuy ( Tucumancito) hasta Tewuk Lliyi (La Merced) más allá. Este cacique se llamaba Julio Salteño.
(wichí)
Los criollos ya lo conocían. Le daban vacas. Comió. No llevaba pantalones, sólo la ropa suya. Calzaba sandalias, las llevaba en la mano cuando caminaba. Caminó a Tartagal. Los criollos se asustaban de verlo. "Tranquilos " les decía. Luego llamó a uno de los que entendía: "Quiero que vuelvan conmigo, quiero que seamos hermanos". Después llegó a Salta. No fue en vehículo. Lo primero, el gobierno. Le sacaron fotos en todas partes.
Entonces dijo a los criollos "Yo soy cacique y camino a todas partes, que seamos hermanos" "De acuerdo". Luego volvió a casa.
Pero allá hicieron de otra manera. Nos vendieron". Aquí no había criollos antes. Julio Salteño abrió el camino para ellos. Los criollos le dieron vacas, como pago. Les dijo : "Sí , hagan sus casas acá". Por eso hay criollos, se mudaron. Hay muchos, trajeron sus animales. Después supimos lo que hacían. Se burlaron de nosotros, nos vendieron.
Los ancianos que vieron dijeron: "Esta tierra ha llegado a ser de ellos".