Viven en Jujuy y en Salta. Sus ocupaciones son antiquísimas y no cuentan con los títulos de propiedad de las tierras. Perseguidos y amenazados por los terratenientes, algunas comunidades sufren severas represiones policiales o son 'persuadidos' de abandonar sus tierras con cierre del paso hacia los centros poblados donde venden sus productos. Algunos ocupan tierras fiscales sin título o como arrendatarios y cuidadores de ganado ajeno. Otros viven en las villas periféricas de las ciudades.